Los KPIs financieros son valores medibles utilizados para controlar el rendimiento de una empresa en la consecución de determinados objetivos financieros. Los KPIs financieros son esenciales para conocer la salud financiera de tu empresa, evaluar tu rentabilidad, optimizar tus recursos y tomar decisiones estratégicas.
En este artículo te explicamos qué son los KPIs financieros, para qué sirven y cómo se utilizan. Además, te mostramos algunos ejemplos de los KPIs financieros más comunes y cómo calcularlos.
¿Qué son los KPIs financieros?
Los KPIs financieros son las siglas de Key Performance Indicators, que en español se traducen como Indicadores Clave de Desempeño o Rendimiento Financiero. Los KPIs financieros son medidas cuantitativas que te permiten evaluar el resultado de las acciones llevadas a cabo por una empresa a nivel financiero. Es decir, son datos o conjuntos de datos que aportan toda la información cuantitativa sobre la consecución de un determinado objetivo financiero.
Los KPIs financieros deben ser específicos, relevantes, medibles, alcanzables y temporales. Es decir, deben estar alineados con tu estrategia financiera, ser importantes para tu negocio, poderse cuantificar, ser realistas y tener un plazo definido.
Por ejemplo, si tu objetivo financiero es aumentar el beneficio neto de tu empresa en un 20% en el próximo año, un posible KPI financiero podría ser el porcentaje de incremento del beneficio neto respecto al año anterior. Este KPI es específico (se refiere al beneficio neto), relevante (está relacionado con el objetivo financiero), medible (se puede calcular), alcanzable (depende de tu capacidad y recursos) y temporal (tiene un periodo de tiempo).
¿Para qué sirven los KPIs financieros?
Los KPIs financieros sirven para conocer el estado y el rendimiento financiero de tu empresa. Sin ellos estarías a ciegas y no podrías saber si estás logrando tus objetivos financieros o si necesitas hacer cambios o mejoras.
Los KPIs financieros te ayudan a:
- Definir tus objetivos financieros y operativos
- Monitorear y evaluar tus resultados financieros
- Identificar tus fortalezas y debilidades financieras
- Detectar oportunidades y amenazas financieras
- Tomar decisiones basadas en datos financieros
- Optimizar tus procesos y recursos financieros
- Mejorar tu competitividad y rentabilidad financiera
¿Cómo se utilizan los KPIs financieros?
Para utilizar los KPIs financieros debes seguir estos pasos:
- Analiza tu situación financiera actual: realiza un diagnóstico interno y externo de tu empresa para conocer tus capacidades, recursos, ventajas competitivas, clientes potenciales, competidores, etc. desde el punto de vista financiero.
- Establece tus objetivos financieros: define qué quieres lograr con tu empresa a nivel financiero a largo plazo y qué valor quieres ofrecer a tus clientes.
- Desglosa tus objetivos financieros en objetivos operativos: divide tus objetivos financieros en objetivos más específicos y concretos que puedas alcanzar en un plazo determinado.
- Elige tus KPIs financieros: selecciona aquellas medidas que te permitan medir el grado de cumplimiento de tus objetivos operativos y que sean relevantes para tu negocio.
- Implementa tus KPIs financieros: utiliza herramientas adecuadas para recoger, analizar y visualizar los datos de tus KPIs financieros.
- Revisa tus KPIs financieros: compara los resultados obtenidos con los esperados y verifica si estás logrando tus objetivos o si necesitas hacer ajustes o correcciones.
Ejemplos de KPIs financieros
Los KPIs financieros pueden ser de diferentes tipos según el aspecto financiero que quieras medir. Algunos ejemplos de KPIs financieros son:
Beneficio neto
El beneficio neto es la diferencia entre los ingresos totales y los gastos totales de una empresa en un periodo determinado. Mide la rentabilidad absoluta de una empresa.
- Fórmula: Beneficio neto = Ingresos totales – Gastos totales
- Ejemplo: Si una empresa tiene unos ingresos totales de 100.000 euros y unos gastos totales de 80.000 euros en un año, su beneficio neto es de 20.000 euros.
EBITDA – Resultado bruto de explotación
EBITDA se posiciona como uno de los indicadores clave de desempeño financiero más importantes para cualquier empresa, siendo un indicador fundamental de su rentabilidad.
Refleja los ingresos de una empresa basados únicamente en su gestión operativa, excluyendo consideraciones como intereses, impuestos, depreciación de activos y amortización.
Este KPI financiero es esencial para comparar el rendimiento de una empresa con otras dentro de la misma industria.
EBITDA puede ser calculado de dos formas:
- Fórmula: EBITDA = Beneficio Neto + Impuestos + Gastos por Intereses + Depreciación y Amortización
- Fórmula: EBITDA = Beneficio Operativo + Depreciación y Amortización
Margen bruto
Margen bruto: es la diferencia entre los ingresos por ventas y el coste de las ventas en un periodo determinado. Mide la rentabilidad relativa de las ventas de una empresa.
- Fórmula: Margen bruto = (Ingresos por ventas – Coste de las ventas) / Ingresos por ventas
- Ejemplo: Si una empresa tiene unos ingresos por ventas de 100.000 euros y un coste de las ventas de 60.000 euros en un año, su margen bruto es del 40%.
Margen neto
Margen neto: es la relación entre el beneficio neto y los ingresos totales en un periodo determinado. Mide la rentabilidad neta de una empresa.
- Fórmula: Margen neto = Beneficio neto / Ingresos totales
- Ejemplo: Si una empresa tiene un beneficio neto de 20.000 euros y unos ingresos totales de 100.000 euros en un año, su margen neto es del 20%.
Retorno de la inversión (ROI)
Retorno de la inversión (ROI): es la relación entre el beneficio obtenido por una inversión y el coste de dicha inversión en un periodo determinado. Mide la rentabilidad de una inversión.
- Fórmula: ROI = (Beneficio obtenido por la inversión – Coste de la inversión) / Coste de la inversión
- Ejemplo: Si una empresa invierte 10.000 euros en una campaña de marketing y obtiene un beneficio de 15.000 euros por dicha campaña en un año, su ROI es del 50%.
Punto de equilibrio
El punto de equilibrio ocupa una posición de máxima trascendencia dentro de los KPI financieros que figuran en esta lista, dado que posibilita la medición del umbral que ha de superarse para generar beneficios.
De ahí que este KPI financiero desempeñe un rol sumamente relevante al analizar el rendimiento de una empresa.
- Fórmula: Punto de equilibrio = costos fijos / margen de beneficio bruto
Los costes fijos hacen referencia a aquellos gastos que se mantienen constantes independientemente de las modificaciones en la producción.
Contar con un entendimiento profundo del margen de beneficio bruto es fundamental para determinar el umbral de rentabilidad, esto es, cuando los ingresos totales equivalen a los costes totales.
Flujo de caja (FC)
Flujo de caja (FC): es la diferencia entre los cobros y los pagos realizados por una empresa en un periodo determinado. Mide la capacidad de una empresa para generar liquidez.
- Fórmula: FC = Cobros – Pagos
- Ejemplo: Si una empresa tiene unos cobros de 120.000 euros y unos pagos de 100.000 euros en un año, su flujo de caja es positivo y es igual a 20.000 euros.
Punto muerto o umbral de rentabilidad (PM)
Punto muerto o umbral de rentabilidad (PM): es el nivel mínimo de ventas que debe alcanzar una empresa para cubrir sus costes fijos y variables en un periodo determinado. Mide el riesgo financiero de una empresa.
- Fórmula: PM = Costes fijos / (Precio unitario – Coste variable unitario)
- Ejemplo: Si una empresa tiene unos costes fijos de 50.000 euros al año, vende su producto a 10 euros la unidad y tiene un coste variable unitario de 5 euros, su punto muerto es igual a 10.000 unidades vendidas al año.
Espero que este artículo te haya sido útil para entender por qué son importantes los KPIs para tu empresa y cómo definirlos. Recuerda que los KPIs son esenciales para gestionar tu negocio con éxito.
